La noche de las velitas es una tradición colombiana en la cual, en la noche del 7 de diciembre, en las vísperas de la Inmaculada Concepción de María, las familias y los amigos se reúnen para encender velitas y farolitos en las aceras de las calles, los patios o los parques, en honor de la Virgen María. Esta tradición da inicio oficial a las fiestas de navidad.

Eran alrededor de las 9 de la noche cuando en la casa noviciado comenzamos a encender las velitas que ofreceríamos a la santísima Virgen; todas nos sentíamos muy alegres y llenas de devoción al poder participar en un acto tan bonito y nuevo para algunas de nosotras. Para la oración fuimos contemplando algunas de las virtudes de nuestra Madre María, rezando el Padre Nuestro, el Ave María y ofreciendo cantos a nuestra Madre.

Después salimos a caminar a un parque cercano: Park Way, en donde muchas familias y grupos de jóvenes salieron a encender velitas; era un espectáculo muy agradable, pues se sentía un ambiente familiar y cálido a pesar de que la noche era algo fría

Conocer una nueva tradición me lleva a amar y valorar más las tradiciones con las que crecí y las que voy conociendo, pues en cada una de ellas puedo ver que la verdadera riqueza de la Iglesia está en cada una de las tradiciones de los pueblos y naciones, tradiciones que nos acercan más a Dios y que se transmiten de generación en generación como una verdadera riqueza y porque son parte de la riqueza de nuestra Iglesia,  de tal modo que podemos decir que son nuestras tradiciones  aunque no hayamos crecido con ellas. 

María Gisela Sánchez López.

Novicia MAR