Te compartimos nuestras noticias y experiencias

JORNADA DE ADORACIÓN EUCARÍSTICA

JORNADA DE ADORACIÓN EUCARÍSTICA

Caminar juntos, es la frase que ha ido resonando en el corazón de todos los católicos desde que en el año 2021 se inició el camino sinodal en la Iglesia. En ese caminar juntos, hemos optado hacerlo con aquellos que comparten con nosotras en el día a día, no por un evento en concreto, sino en lo cotidiano, donde se forja la vida y donde Dios se hace presente en cada detalle.

Como Congregación, nos estamos preparando para un acontecimiento muy importante y es: el XIII Capítulo General, que se realizará desde el 16 de julio del presente año, llevando como lema: «libres y disponibles para anunciar el Reino».

Ante ello, en el colegio Santa Rita, ubicado en Maracaibo, Venezuela, en la semana previa al Corpus Christi, hemos empezado una jornada de Adoración Eucaristica, para colocar a los pies del Maestro este tiempo previo y la ejecución del Capítulo General.

Iniciamos a la 7:00 am hasta la 1:20 pm, nuestros estudiantes, van pasando por grado y sección, desde los mas pequeños hasta los más grandes, al igual que todo el personal y las hermanas de la comunidad.

Por otro lado, durante la semana se está rezando la oración por el Capítulo y  también se les explica el significado del logo para que ellos lo coloreen.

Por último, quiero resaltar que al informar a los padres, madres y representante de la Adoración Eucarística, voluntariamente han decidido estar cada hora ante el Señor e ir rotando para que Él no se quede solo.

Ha sido una experiencia maravillosa para todos, por eso, queremos compartirles algunos testimonios de las madres que han vivido esta experiencia:.

Patricia Carrasquero: Haber podido adorar al Santísimo como marco preparatorio para el Consejo General de las Misioneras Agustinas Recoletas, sin duda, no solo fue un momento de oración y agradecimiento a Dios por ellas, sino también como ejercicio para calmar el alma y poder tener un tiempo alejada del mundo exterior y en conexión profunda con Jesús Eucaristía.

Claudia Bruno: Adorar a Jesús Sacramentado es la mejor terapia para fortalecer la Fe y vivir alegre, adorar al Santísimo nos recuerda que Jesús nos ama tanto que se quedó con nosotros en el Sacramento de la Eucaristía. Lamentablemente me he dejado absorber por la rutina diaria perdiendo esos momentos especiales de encontrarme diariamente con Jesús, fue maravilloso poder tener la oportunidad de reunirme con Él en esta actividad de adoración para recargar mi corazón y mi alma de amor y energía para seguir adelante.

Nelaine Gonzalez: Mi experiencia con el Santísimo fue mágica, al estar cerca de Él me permitió encontrarme conmigo misma. Fue una maravillosa oportunidad de rezar con el corazón en pleno. Sentí mucha serenidad y paz. Me encantó, no estaba muy convencida de hacerlo pero gracias a Dios me deje convencer.

Giomilin Fuentes: Fue una experiencia emotiva llena de paz y tranquilidad, donde me regalé el tiempo para interiorizar y concentrarme en el encuentro con Dios. Momentos que perdemos y nos limitamos por el día a día, la rutina y cotidianidad. Pero que siempre es bueno para uno darse la oportunidad y aprovechar cualquier espacio que encuentres o te ofrezcan para adorar, pedir y agradecer a nuestro Padre amado, bondadoso y misericordioso.

DAMOS GRACIAS A DIOS PORQUE SE QUEDA CON NOSOTROS Y NOS INVITA A CAMINAR JUNTOS.

Comunidad del Colegio Santa Rita, Maracaibo, Venezuela

DESDE LA COMUNIDAD SAN AGUSTIN BOGOTÁ

DESDE LA COMUNIDAD SAN AGUSTIN BOGOTÁ

Queremos compartirles, algunas vivencias celebrativas de la comunidad de hermanas mayores san Agustín, en Bogotá.

EL Señor siempre se hace presente en los acontecimientos de la vida diaria; Él nos acompaña en este proceso de crecer, como comunidad y de manera personal.

Vivir con las hermanas mayores es una experiencia, que nos lleva a reflexionar sobre el acontecer en el atardecer de la vida, donde cada una con su actitud, va demostrando lo que ha sido su servicio y entrega a la misión mediante su consagración religiosa, a través de gestos de: cariño, atención, acogida a las personas que se acercan a nuestras comunidades.

En la organización de la comunidad se planean diversas actividades dirigidas, para estimular la memoria, la motricidad, el conocimiento de las hermanas, especialmente las mayores, esto les ayuda a mantenerse activas.  En los tiempos litúrgicos, se aprovecha para profundizar y desarrollar la creatividad, elaborando material que motiva a vivir mejor nuestra fe. Aún con sus limitaciones físicas o de memoria, participan en las actividades que les hace bien para la salud del cuerpo y mantiene en forma el espíritu.

En semana santa se prepararon las celebraciones de cada uno de los días santos. El domingo de ramos se hizo la procesión, por el patio exterior de la casa, todas caminamos, también nos acompañaron familiares de algunas de las hermanas y miembros de FRAMAR, quienes ven un testimonio en las hermanas mayores, que, a pesar de sus limitaciones por la edad, viven con alegría cada encuentro y participan con fe.

También se celebró la liturgia del jueves santo, se tuvo la hora santa, dando espacio para estar acompañando a Jesús Eucaristía. Cada hermana ha sido responsable de asumir un momento personal para estar a solas con el que entregó su vida por nosotros, estos momentos, dan fortaleza a la comunidad para orar las unas por las otras e ir caminando juntas

El viernes santo a las dos hermanas más mayores (90 años) se les ayudó para que pudieran salir en silla de ruedas, a recorrer la manzana rezando el vía crucis; el sábado santo se hizo una oración mariana, acompañando a María en su soledad. La vigilia pascual, la vivimos con intensidad, en esta etapa de la vida, cobra mayor significado la liturgia de la luz y experimentar el gozo de resucitar con Jesús.

Llegó el mes de mayo. También nos hemos organizado para dar realce al mes mariano, intensificamos la oración, rezando un rosario adicional, por las vocaciones y presentándole a María nuestras intenciones.

El último sábado de mes tenemos el retiro mensual; el padre Germán Rodríguez OAR, nos acompaña en este camino espiritual, es una bendición para la comunidad contar con este espacio para vivir en proceso de conversión.

Damos gracias al Señor que nos permite tantas experiencias donde palpamos su amor, sentimos que se manifiesta y nos fortalece para seguir respondiéndole, en la misión de construir una comunidad Misionera Agustina Recoleta.

Lo sentimos presente en la disponibilidad de las personas que trabajan con nosotras, para que esto sea posible y las hermanas den testimonio de su vida consagrada y a la vez reciban el cariño y la atención integral como parte de la misión.

Comunidad San Agustín Bogotá

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

LECTIO DIVINA  SANTÍSIMA TRINIDAD

LECTIO DIVINA SANTÍSIMA TRINIDAD

 ORACIÓN

 Ven Espíritu Santo, Ven a nuestra vida, a nuestros corazones, a nuestras conciencias. Mueve nuestra inteligencia y nuestra voluntad para entender lo que el Padre quiere decirnos a través de su Hijo Jesús, el Cristo. Que tu Palabra llegue a toda nuestra vida y se haga vida en nosotros. Amén.

 PRIMERA LECTURA: Éxodo 34, 4b- 6.8-9

SALMO RESPONSORIAL: Salmo Daniel 3, 52-56

SEGUNDA LECTURA: 2 Corintios 13,11-13

 LECTURA PAUSADA DEL EVANGELIO: Juan 3, 16-18

 Porque Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todos los que creen en Él no mueran, sino que tengan vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo para condenar al mundo sino para que el mundo sea salvado por Él”.

“El que cree en el Hijo no es juzgado; pero el que no cree, ya ha sido juzgado porque no cree en el único Hijo de Dios.

  1. ¿QUÉ DICE EL TEXTO?

San Juan, nos presenta este texto tan importante que es como un resumen de lo que él mismo ha vivido con Jesús. Recordemos que Juan mismo en su primera carta en el capítulo 4 versículo 8 dice claramente la definición de Dios: “Dios es amor”.

Por lo tanto, la teología presente del evangelista Juan, que escribió alrededor de los años noventa de nuestra era, cuando ya Juan y las comunidades de discípulos han reflexionado bastantes años sobre el misterio de Jesús, el Cristo, llegan a la síntesis clara sobre el amor de Dios y Dios que es amor.

Juan hace en medio de su Evangelio, toda la síntesis del mismo, El amor de Dios es tan grande, que envía a su único Hijo para salvar a toda la humanidad que había caído en la desgracia. Esa desgracia del pecado y su consecuencia la muerte, ya han sido vencidas por quien venció al mundo, y venció la muerte. Esta es la victoria que trae para todos los que creen en Él: ofrecer la vida inmortal y para siempre.

La conjugación de los verbos de parte de Juan es muy curiosa, dice para que el mundo se salve por medio de Él. Es decir, deja también la voluntad a las personas de creer en Jesús, el Cristo, el Señor.

La propuesta de Juan es simple, hay que creer en el Hijo de Dios. Hay que creerle a Él, no sólo decir de labios para afuera que Jesús es el Mesías, el enviado… etc. Sino creerle a Él y a sus mandamientos de amor, para poder recibir la salvación y la vida eterna.

 RECONSTRUIMOS EL TEXTO

¿Cómo comienza el texto?

¿Qué dice Juan, cuál es la actitud de Dios Padre para con el mundo?

¿Qué hizo entonces Dios para salvar al mundo?

¿Qué es necesario para recibir la salvación?

¿Qué sucede con los que creen en Jesús?

¿Qué sucede con los que no creen?

¿Vino Jesús para juzgar? O ¿cuál fue su misión?

¿Cómo culmina el texto?

  1. MEDITACIÓN: ¿Qué me dice o nos dice Dios en el texto?

Muchas veces nos confundimos con la Trinidad, hoy queremos entender este concepto que viene de la Filosofía. ¿Entiendo que Dios, el Padre, ha enviado a su Hijo Único para salvar a todos los que vivimos en este mundo?

¿Y entre los que vivimos en este mundo, estoy yo? ¿Me doy cuenta?

Si tuviera que poner un porcentaje a mi fe ¿Cuánto me pondría?

¿Me doy cuenta que de mi fe nace una esperanza para la vida eterna?

¿Es la fe para mí un adorno cultural? ¿O es un motivo de vida permanente, que me impulsa a seguir creciendo?

¿Qué significaría en este caso tener vida? ¿No morir?

¿Qué espero del Juicio del Señor?

¿El creer, cambia mi vida?

  1. ORACIÓN: ¿Qué le digo o le decimos a Dios?

Orar, es responderle al Señor que nos habla primero. Estamos queriendo escuchar su Palabra Salvadora. Esta Palabra es muy distinta a lo que el mundo nos ofrece y es el momento de decirle algo al Señor. Oremos con el texto de Daniel propuesto para este domingo:

 Bendito seas, Señor, Dios de nuestros padres, a ti gloria y alabanza eternamente. Bendito sea tu Nombre, santo y glorioso, a él gloria y alabanza eternamente.

Líbranos, con tu poder maravilloso, y da gloria a tu Nombre, Señor.

Bendito seas en el templo de tu santa gloria, a ti gloria y alabanza eternamente. Bendito seas en tu trono real, a ti gloria y alabanza eternamente.

Sean humillados los que nos maltratan, queden confundidos, pierdan el mando, sea destruido su poder.

Bendito cuando cabalgas sobre querubines penetrando los abismos, a ti gloria y alabanza eternamente. Y sepan que tú, Señor, eres el Dios único glorioso, en toda la tierra.

Bendito seas en el firmamento del cielo, a ti gloria y alabanza eternamente. Criaturas todas del Señor, bendigan al Señor, canten en su honor eternamente.

 

Hacemos un momento de silencio para responder al Señor y demos gracias porque nos llena de alegría.

Añadimos nuestras intenciones de oración. Amén

  1. CONTEMPLACIÓN: ¿Cómo interiorizo o interiorizamos la Palabra de Dios?

 En este momento podemos repetir varias veces este versículo del Evangelio para que vaya entrando a nuestra vida, a nuestro corazón.

 «EL QUE CREE EN EL HIJO NO ES JUZGADO»

 Y de esta forma nos ponemos en contemplación, repitiendo y agradeciendo a Jesús que venga.

  1. ACCIÓN: ¿A qué me o nos comprometemos con Dios?

 Debe haber un cambio notable en mi vida. Si no cambio no soy un verdadero cristiano.

 Si estoy solo, vuelvo a leer el texto, busco el interior de las palabras que son dadas para mí. Escribe tu compromiso misionero. Ve a llevarle este mensaje a alguien que lo necesita.

 En el grupo. Es importante descubrir con el grupo la acción de Dios para con todos nosotros. No proponemos ser misioneros de Dios que vino a liberarnos del pecado con su amor. Vamos a ir a llevar a Jesús para que lo conozcan otros que aún no lo conocen.

CONVIVENCIA VOCACIONAL «PROYECTO DE DIOS»

CONVIVENCIA VOCACIONAL «PROYECTO DE DIOS»

El día 16 de mayo estuvimos de convivencia vocacional! Esta vez aprovechando el feriado del día del maestro aquí en Querétaro! Fue muy bueno! Estuvieron presentes 12 chicas!

El encuentro se construyó entre todas las hermanas; cada cuál asumió  una parte del encuentro que  tuvo como tema: El proyecto de Dios, la persona ideal.

Empezamos a las 10 am y se terminó a las 4 pm! Fue poco tiempo, pero alcanzó para todo, incluso un paseo al parque para jugar en los columpios y al básquetbol!

Volvieron «bronceadas» por el sol, cansadas, pero muy felices y contentas! A la hora de la comida: «Uauuuuuu» todas dijeron cuándo miraron   llegar las hamburguesas y papas fritas!

Los momentos de reflexión fueron intensos y muy bien aprovechados!

Bendito sea Dios por una oportunidad más de vivir estos momentos y dar a los jóvenes y adolescentes un espacio más de vivir su encuentro con Dios!

Gracias a Dios! Gracias a las hermanas quien conmigo asumió todo eso!

Jacira Bhering da Silva M.A.R

MADRE ÁNGELES GARCÍA Y LA BEATA CONCHITA BARRECHEGUREN

MADRE ÁNGELES GARCÍA Y LA BEATA CONCHITA BARRECHEGUREN

Es noticia en España, especialmente en Granada, la reciente beatificación de MARÍA DE LA CONCEPCIÓN DEL PERPETUO SOCORRO BARRECHEGUREN GARCÍA, conocida simplemente como “Conchita”, el pasado 6 de mayo de 2023.

Esta nueva beata, que apenas vivió veintiún años, cinco meses y dieciséis días, nació en Granada el 27 de noviembre de 1905 y fue bautizada el 8 de diciembre del mismo año. Era hija del Siervo de Dios Francisco Barrecheguren Montagut y Concepción García Calvo.

Su corta vida se caracterizó por una salud precaria, cuyas consecuencias, sumadas a otras difíciles circunstancias, hicieron de su existencia algo muy difícil, a pesar de lo cual, supo “sacar fuerzas de flaqueza” y sobreponerse, desarrollando una extraordinaria calidez y simpatía, a la vez que una fe segura e inquebrantable, que hicieron de esa persona físicamente frágil, alguien fuerte y atrayente en lo espiritual.

Una tuberculosis adquirida luego de una visita a Lisieux, Francia (donde vivió y murió Santa Teresita del Niño Jesús), terminó con su vida, no sin antes padecer otro dolor, como fue el de ver a su madre ingresada en un sanatorio por desequilibrios mentales. Conchita murió en Granada el 13 de mayo de 1927.

La Madre Ángeles García Ribero, andaluza como Conchita, nació un día después del bautizo de ésta última el 9 de diciembre de 1905, lo que las hace contemporáneas. En su diario, publicado en 1984 bajo el título “Una misionera agustina recoleta en China”, hace mención de Conchita en tres oportunidades.

Con motivo del largo viaje de regreso a España que emprendió después de casi 18 años seguidos en China, a su paso por Karachi (Pakistán), en una de las escalas del avión, escribió el 20 de agosto de 1948 (pág. 185): “El calor es sofocante. El jefe de Aduanas parece ser católico. Hizo una señal a los subalternos y ni siquiera tocaron nuestras maletas… Gracias, San José bendito, gracias mi querida Santa Gema y Conchita Barrecheguren. No, no habéis dejado frustrada la esperanza que tuve en vuestra protección al tomaros allá en Shanghai como patronos de mi largo viaje. Ya iré, mi querida Conchita, a visitar tu sepulcro…”

Ya en España, un mes después, el 20 de septiembre, luego de visitar la Alhambra, dice (págs. 260-261): “De aquí nos fuimos al Carmen de Conchita, a la casa donde vivió y murió «mi vieja amiguita» que me ha ayudado en mi rincón de China. En una vitrina se guarda el velo y la corona de su Primera Comunión. En otra, la mantilla española, los objetos de su uso, hasta las alpargatas o zapatillas… Ella que se maravillaba de que guardasen en vitrinas las sandalias de Santa Teresita… En el cepillo he depositado la limosna prometida al subir al avión. Después de adorar al Santísimo, que siempre está expuesto, nos dirigimos al sepulcro para cumplir la promesa de rezar ante su cuerpo virginal”.

 Más adelante complementa (pág. 262) “Visitamos el sepulcro de nuestra querida Conchita. Entre los nombres que ostenta la blanca piedra de un elegante panteón familiar, se lee: «Señorita Concepción Barrecheguren, muerta en olor de santidad a los veintiún años». He rezado pidiendo su ayuda, dando gracias”.

 Por la forma como se expresa sobre Conchita, pareciera como si hubiese llegado a conocerla personalmente. De ser así, tendría que haber sido antes de su entrada al convento a los 16 años, de donde no salió hasta 1931 cuando se embarcó para la China.

Aunque ambas manifestaron su interés por la vida religiosa, solo la Madre Ángeles logró materializar ese anhelo con las Agustinas Recoletas del convento de Corpus Christi; Conchita, quería ser Carmelita Descalza, pero su salud se lo impidió, por lo que asumió su realidad como una vocación laica, y en medio de ella se santificó, encontrando, (como dijo el Cardenal Semeraro en la homilía de la ceremonia de beatificación) “en la enfermedad una oportunidad de gracia, redención y caridad”, ejerciendo ésta última virtud teologal, según el redentorista Francisco José Tejerizo Linares, postulador de su causa de beatificación, ( y como dato curioso), “en el  Ropero de los pobres de Santa Rita de los Padres Agustinos Recoletos.

Por último, vale la pena tener en cuenta el siguiente concepto del mismo P. Tejerizo: “La sencillez de Conchita y su ser cristiana del montón, es un testimonio actual. Ella aparece como una parábola de Evangelio, para quien quiera intuir otras posibilidades de vida y felicidad. Su fe inquebrantable y su fidelidad, no dejan de sorprender”.

Por: Alejandro Archila Castaño

 

 

 

 

LECTIO DIVINA DOMINGO DE PENTECOSTÉS. CICLO -A-

LECTIO DIVINA DOMINGO DE PENTECOSTÉS. CICLO -A-

ORACIÓN INICIAL

 

Que mi oído esté atento a tus susurros.

Que el ruido cotidiano no tape tu voz.

Que te encuentre, y te reconozca y te siga.

Que en mi vida brille tu luz.

Que mis manos estén abiertas para dar y proteger.

Que sepa hablar de paz, imaginar la paz, construir la paz.

Que distinga en el horizonte las señales de tu obra.

Todo esto deseo, todo esto te pido, todo esto te ofrezco,

Padre.

(José Mª R. Olaizola, sj. Fragmento)

TEXTO BÍBLICO Jn. 20, 19-23

Al anochecer de aquel día, el primero de la semana, estaban los discípulos en una casa, con las puertas cerradas por miedo a los judíos. Y en esto entró Jesús, se puso en medio y les dijo: «Paz a vosotros». Y, diciendo esto, les enseñó las manos y el costado.

Y los discípulos se llenaron de alegría al ver al Señor. Jesús repitió: «Paz a vosotros. Como el Padre me ha enviado, así también os envío yo».

Y, dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo: «Recibid el Espíritu Santo; a quienes les perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos».

¿QUÉ DICE EL TEXTO?

El Espíritu nos abre a la comunidad, a la eclesialidad. El seguimiento no lo hacemos en solitario. Si en Jesús se revela la Paternidad y Maternidad de Dios, a este Dios se le acredita, se le testifica, se hace verdad y se santifica su Nombre en la medida que nos abrimos a la comunidad. Es un Espíritu que nos quiere libres y diversos, cada uno tiene su don, su “chispa de gracia”, no anula la diversidad porque eso sería muerte, no anula las particularidades culturales y personales porque eso sería totalitarismo, sino que es un Espíritu que une lo diverso para que nos reencontremos en nuestra radical dignidad de hijas e hijos de Dios. La unidad está en nuestra misma humanidad ¡Gracias, Jesús!

Han sido necesarios cincuenta días, y toda una vida, para disfrutar de la Buena Noticia de la Pascua del Señor Jesús, para ahondar en todo lo acontecido en Él. Si hoy después de tantos siglos seguimos sintiendo que nuestros corazones arden, aunque sea un poquito, cuando nos acercamos a Él, es porque su Santo Espíritu sigue aleteando. (Fuente: Toni Catalá. Cuadernos Ciclo A. C. Arrupe. Valencia).

MEDITACIÓN

Fuente: Papa Francisco

  • El Espíritu desciende sobre nosotros, a pesar de todas nuestras diferencias y miserias, para manifestarnos que tenemos un solo Señor, Jesús, y un solo Padre, y que por esta razón somos hermanos y hermanas. Empecemos de nuevo desde aquí, miremos a la Iglesia como la mira el Espíritu, no como la mira el mundo. … La mirada mundana ve estructuras que hay que hacer más eficientes; la mirada espiritual ve hermanos y hermanas mendigos de misericordia. El Espíritu nos ama y conoce el lugar que cada uno tiene en el conjunto: para Él no somos confeti llevado por el viento, sino teselas irremplazables de su mosaico.
  • El secreto del Espíritu es el don. Porque Él es don, vive donándose a sí mismo y de esta manera nos mantiene unidos, haciéndonos partícipes del mismo don. Es importante creer que Dios es don, que no actúa tomando, sino dando. …Examinemos nuestro corazón y preguntémonos qué es lo que nos impide darnos. Decimos que tres son los principales enemigos del don: tres, siempre agazapados en la puerta del corazón: el narcisismo, el victimismo y el pesimismo. El narcisismo, que lleva a la idolatría de sí mismo y a buscar sólo el propio beneficio. El narcisista piensa: “La vida es buena si obtengo ventajas”. Y así llega a decirse: “¿Por qué tendría que darme a los demás?”. …también el segundo enemigo, el victimismo, es peligroso. El victimista está siempre quejándose de los demás: “Nadie me entiende, nadie me ayuda, nadie me ama, ¡están todos contra mí!”. Y su corazón se cierra, mientras se pregunta: “¿Por qué los demás no se donan a mí?”. …Por último, está el pesimismo. “Todo está mal, la sociedad, la política, la Iglesia…”. El pesimista arremete contra el mundo entero, pero permanece apático y piensa: “Mientras tanto, ¿de qué sirve darse? Es inútil”. …Cuando se piensa así, lo que seguramente no regresa es la esperanza. En estos tres —el ídolo narcisista del espejo, el dios espejo; el dios-lamentación: “me siento persona cuando me lamento”; el dios-negatividad: “todo es negro, todo es oscuridad”— nos encontramos ante una carestía de esperanza y necesitamos valorar el don de la vida, el don que es cada uno de nosotros. Por esta razón, necesitamos el Espíritu Santo, don de Dios que nos cura del narcisismo, del victimismo y del pesimismo, nos cura del espejo, de la lamentación y de la oscuridad.

ORACIÓN ¿QUÉ RESPÒNDO A DIOS QUE ME HABLA EN EL TEXTO?

Señor, hazme un instrumento de tu paz:

donde haya odio, ponga yo amor,

donde haya ofensas, ponga yo perdón,

donde haya discordia, ponga yo unión,

donde haya error, ponga yo verdad,

donde haya duda, ponga yo fe,

donde haya desesperación, ponga yo esperanza,

donde haya tiniebla, ponga yo luz,

donde haya tristeza, ponga yo alegría

COMTEMPLACIÓN: ¿CÓMO REFLEJO EN MI VIDA LO QUE ME DICE EL SEÑOR?

  • Salgamos fuera al descubierto, a la intemperie y dejemos que la alegría de vivir y el fuego de amor embriaguen y perfumen los lugares donde existimos. Sonriamos a los otros, dejemos que vibre y estremezca la emoción, que haya una con-moción, un gesto espontáneo en nuestro entorno que alguien se sienta querido, amado y aceptado más allá de su pensamiento, sólo por ser la imagen de aquel que nos enciende. Dejemos que la variedad de dones de Aquel que nos mueve, nos enciende y nos ama se expresen en su prodigalidad y se distribuyan sin pedir autorización. El viento y el fuego se divierten, sirviéndose de nosotros como instrumentos gozosos de la vida. Son incontrolables, imprevisibles, no programables…, son el Espíritu de Dios. (L. d S. de Jesucristo).

ACCIÓN: ¿A QUÉ ME COMPROMETO?

  • La presencia de Jesús nos trae la paz., vive en la paz que da Jesús y transmítela.
  • El Espíritu es derramado sobre cada uno de nosotros. Examina que “paraguas” utilizas en tu vida para que no cale la llovizna de su santo Espíritu.
  • En Pentecostés escuchamos en boca de Jesús “paz a vosotros” Identifica que cosas te perturban la paz.
  • Como Jesús envío a los discípulos así lo hace también con nosotros, sus discípulos de hoy. Descubre que el Señor hoy te invita a ti para que seas su testigo en tu realidad de cada día.
  • Ahora más que nunca, necesitamos la presencia del Espíritu para que todos hablemos el mismo lenguaje: el lenguaje del amor.  Sólo entonces nos entenderemos todos. Pídelo al Espíritu y comprométete a utilizar este lenguaje.
  • Con María recógete en oración, ábrete al Espíritu, déjate llenar por Él y agradece su venida

 

FUENTE: https://catequesiscadizyceuta.wordpress.com/2023/05/22/lectio-divina-domingo-de-pentecostes-ciclo-a-jn-20-19-23-28-mayo-2023/

 

Ser Misioneras

 

Ser Agustinas

 

Ser Recoletas

Un mensaje para ti

Compartimos lo que somos

En Misión Compartida

Mujeres con esperanza