UNIDAS POR DIOS Y LA DIGNIDAD DE LA MUJER
Hace unos días, fuimos invitadas por nuestros hermanos y hermanas de la comunidad musulmana Ahmadia de México que se encuentra a dos calles de nuestra comunidad, es la primer cede mexicana de esta rama del islam.
Ciertamente, el mes de marzo en esta ciudad, es el mes de la mujer desde principio a fin. Con actividades, marchas, talleres, audiovisuales, charlas, conferencia. Dentro de estas actividades pudimos compartir un diálogo interreligioso del papel de la mujer y su dignidad en las distintas religiones. Para eso fueron invitadas mujeres representantes de distintas religiones, como el budismo, cristianismo-catolicismo e islamismo propiamente. Tenemos que saber que las dos grandes ramas del islam y las más conocidas son Sunitas y Chiitas y estas al mismo tiempo enmarcan otras derivadas como Ahmadia de tendencia Sunita, su lenguaje es ante todo entender bien el Corán. La campaña que trabaja la Asociación de Civil de Mujeres Musulmanas -Musulmanas Latinas es la de entablar un diálogo interreligioso y a través el él buscar vínculos de paz, pero también trabajar por la dignidad de la mujer en el mundo. Se trata de la más reciente campaña de este tipo en la Ciudad de México, pero dista de ser la única. Otras organizaciones y grupos musulmanes —como el Centro Salafí de México, trabajan por tender lazos de paz. Dicha paz no se da si no se cuentan con todos los miembros de una comunidad, y esa comunidad está formada por hombres y mujeres que se esfuerzan por hacer presente a Dios en su vida cotidiana. El diálogo interreligioso pretende en este caso poner al frente la dignidad de la mujer en las diferentes religiones, sabiendo que son creación del mismo Dios, y que tanto el Corán, la Biblia y otros libros religiosos ponen de relieve a la mujer en muchos aspectos; así hablamos del papel de la mujer en la educación no solo como madres sino como profesionales, al mismo tiempo se tocó la persona de la virgen María y su compromiso como mujer perteneciente a una sociedad judía y como madre de Dios y del gran Profeta y príncipe de la Paz. Entre otros temas se toco lo que concierne al aborto, al maltrato a la mujer, así como las distintas maneras en las que las tradiciones han hecho del sexo femenino una causa de represión constante a través de los siglos. En este espacio pudimos compartir nuestra posición no solo como mujeres, sino como religiosas comprometidas con el Evangelio, la persona de Jesús y lo que esto conlleva en nuestras vidas como consagradas y nuestro fuerte compromiso con la humanidad y con la defensa de la dignidad de la mujer en esta sociedad del 2024. Al finalizar pudimos compartir unos ricos alimentos preparadas por nuestras hermanas musulmanas que nos invitaron al siguiente diálogo como ponentes, se celebrará en mayo de este año.
Comunidad de la ciudad de México
