En esta ocasión las junioras que estamos en el curso de preparación a los votos perpetuos, queremos compartir con ustedes nuestra participación en la Semana de Vida Consagrada.
La 51ª Semana Nacional de Vida Consagrada, organizada por el ITVR (Instituto Teológico de Vida Religiosa), este año tuvo la temática “Somos relación, somos en relación” Fue una mirada interdisciplinar al abanico de relaciones de Vida Consagrada; se llevó a cabo del 20 al 23 de abril en la Residencia Amor de Dios en Madrid.
El día 20 resaltó la dimensión SOMOS HIJOS y se tuvo la siguiente dinámica:
Sección de apertura, ahí el Cardenal Aquilino Bocos, cmf, expresó “¿Por qué es importante el tema de la relación?; el tema siguiente fue “Una impronta muy conectada con Jesús”, dividida en dos subtemas; el primero “La relación de Jesús con el Padre. Filiación” dado por Prof. Santiago Guijarro; la segunda parte fue sobre “Jesús, el hombre de las relaciones”; este tema lo impartió Gonzalo Fernández, cmf. Fueron interesantes ya que partimos desde la relación de Jesús con el Padre, con su Abba y cómo esta relación amorosa influyó en Jesús al cumplir la voluntad de su Abba. Es importante resaltar que Jesús en su tiempo se relacionó con todo tipo de personas: adversarios, enemigos, pecadores, maestros de la ley, enfermos, mujeres… fue cercano, compasivo, auténtico, y nos dio la salvación.
Por la tarde se presentó el tema “El acompañamiento y la soledad” por parte de Luica Villanego, del equipo Ruaj. Partió de la pregunta ¿la soledad es bendición o maldición? La soledad tiene un lado bueno, necesitamos de espacios de soledad para encontrarnos con nosotros mismos, conocernos… pero la soledad en su lado oscuro es ausencia de relaciones y cuando estamos sumergidos en ella es como una noche oscura que daña nuestro espíritu, estado de ánimo y hasta nuestra biología; recordemos que antropológicamente el ser humano es un ser de relación, nacimos para la relación. En la VC existe una soledad ya que es parte de la opción de vida y podemos preguntarnos ¿cómo vivo esa soledad? ¿escucho la voz de Dios o me he quedado sorda? Para afrontar estas respuestas es importante el conocimiento que se tenga de sí misma, saber quién soy; es necesario hacer un viaje al interior, reconocer la propia vulnerabilidad, abrazarla y presentarla al Padre para poder recobrar la conciencia de ser hija amada. El acompañamiento es algo fundamental para la vida en todos sus niveles, pero también tenemos que ser conscientes de que somos compañeros de camino y por lo tanto acompañantes de los demás (¿qué tipo de compañía soy?) Luica terminó explicando que una cualidad de un buen compañero de camino es vivir en actitud de discernimiento.
La última charla del día fue “El complejo entramado de la comunicación personal, interpersonal y comunitaria”. Luis Ma García, sj, expresó que la perfecta comunión con uno mismo es difícil y que tenemos que aceptar que no somos pura elección libre, que no todo lo que vivimos me lo explico o lo explico de una forma lúcida y racional porque puede haber ahí un mundo emocional que me mueve más de lo que yo creía. Hizo un llamado a conocerse mejor. También manifestó que son difíciles las relaciones porque al ponerse en comunicación una persona que no se conoce con otra que tampoco se conoce no puede haber fluidez y en realidad no se da la comunicación. A veces agredimos sin saberlo, hacemos daño y, ante esto, lo que se puede hacer es conocerse un poco mejor para ser conscientes de por qué y cómo nos afectan las cosas. Finalizamos el día con la Eucaristía inicial.
El 21 de abril el hincapié fue en la dimensión SOMOS HERMANOS; los temas fueron:
La primera charla de la mañana fue dada por José Cristo Rey Garcia Paredes, cmf, con el tema “El nosotros eclesial”. La sinodalidad como nuevo proyecto de relación”. Posteriormente el Cardenal Miguel Ángel Ayuso, mccj, dio el tema de “El nosotros inter-religioso”. El diálogo interreligioso como espacio de encuentro y apuesta de futuro”.
La jornada de la tarde comenzó con la Prof. Marta López Alonso, ella dio el tema “Una lectura cristiana de la ética del cuidado. Aplicación a la vida consagrada”. Marta advirtió que en las comunidades religiosas puede suceder que el cuidado se dé únicamente a quienes son destinatarios externos de la misión y carisma. Invitó por tanto a mirar dentro de las comunidades y preguntarnos ¿cómo soy con mis hermanas de comunidad? ¿soy fuente de ternura? Hizo énfasis en que el cuidado parte de las Escrituras en especial de la perícopa del Buen Samaritano que cuidó y mandó que cuidaran, como una forma de amar. También hizo un llamado a acercarnos a las hermanas de comunidad pues puede darse el caso de que, aunque se viva habitación con habitación se esté muy lejos; la frialdad y la falta de caridad pueden afectar gravemente nuestras relaciones comunitarias. Finalizó diciendo que no hay cuidado si no se mira al otro y no hay amor sin una verdadera preocupación por el otro que me mueva a ayudarlo.
La segunda charla de la tarde fue dada por María del Carmen Massé, “Un tejido de “nuevas relaciones” que desconciertan e interpelan a la vida consagrada”. Comenzó señalando que las relaciones con los demás, con nosotros mismos e incluso con Dios han cambiado, pero que el evangelio llama a reconocer la realidad tal y como es, encontrar amor y ternura, acompañar con amor, paciencia y misericordia y anunciar las exigencias del Reino. Habló especialmente sobre la realidad actual, cómo es que se componen las nuevas familias, las nuevas formas en que la persona expresa su ser y finalmente dijo que teníamos pendiente en la Iglesia el saber escuchar y acoger a todos independientemente de sus particularidades.
El viernes 22 de abril la mañana resaltó la dimensión SOMOS PEREGRINOS:
El tema primero fue “La “peregrinación”. Una categoría para entender y vivir la misión de la vida consagrada”, el ponente fue Ricardo de Luis Carballada, op. Posteriormente se dio el tema “A la escucha del hombre, a la escucha del tiempo, a la escucha del ser”; esta charla la dio José Carlos Bermejo, y Xabier Azcoitia del Equipo “Humanizar”.
Por la tarde se puso el énfasis en la dimensión SOMOS CUIDADORES:
Se tuvo una mesa redonda donde participaron:
Birgit Weiler, mms, con el tema “La propuesta de la “casa común” aplicada a la vida consagrada”, Bert Daelemans, sj, “El reto de construir nuevos espacios significativos. La vida consagrada y las estructuras que visibilizan su presencia” y Fray Abel de Jesús, ocd, “El planeta invisible: el ciberespacio y los consagrados”.
Abel comenzó expresando que internet es un continente y es el más habitado; la Iglesia debe estar atenta a los signos de los tiempos para interpretarlos y dar respuestas. Invitó a hacer presencia en este continente de una manera correcta, brindando información de calidad a los cibernautas sedientos de verdades; si nosotros nos ausentamos, las personas reciben cualquier tipo de información vacía de Dios.
El día finalizó con una oración acompañada de música que amenizó el P. Damián Montes.
El día 23 se resaltó la dimensión SOMOS ADORADORES:
Nurya Martinez, aci, fue la última ponente de la semana con el tema ““En espíritu y verdad”. Adorar a Dios, actuar en la historia”. Posteriormente Antonio Bellella, cmj, director del ITVR, hizo lectura de la síntesis de la semana, expresando que, aunque la semana no tuvo un título que fuera alusivo al Sínodo de la Sinodalidad que vive actualmente la Iglesia, sin embargo, los temas tenían ese toque ya que la relación es ir juntos, caminar juntos.
Finalizamos la semana con la eucaristía conclusiva.
Luz Elena, Isabel, Juanita y Miriam.
