El día 11 de Junio los alumnos de 4to de ESO tuvieron una convivencia, que culminó con una Eucaristía de acción de gracias…Esta actividad se viene realizando cada año y aun en medio de la situación en que nos encontramos no se dejó de hacer…

La convivencia se llevó a cabo toda la mañana de este día y participaron las hermanas Karen Polanco y Brenda Ovalle, en unidad con algunos profesores del colegio. Para cerrar este espacio de encuentro y fraternidad entre los alumnos, se llevó celebró una eucaristía la cual fue presidida por el padre José Gabriel, sacerdote diocesano.

Nos reunimos alrededor de la mesa de la vida, la Eucaristía, signo de agradecimiento a Dios por su gran bondad y hoy exaltamos que la presencia del Señor haya acompañado cada uno de los pasos  y logros alcanzados de estos chicos. Son culminaciones que implicaron esfuerzos, sacrificios, dedicación y sobre todo, constancia para poder una vez más decir: el Señor ha estado guiando cada uno de sus pasos, Él ha estado grande con ellos y están alegres.

Algunos de los jóvenes expresaban en esta experiencia vivida que muchas cosas nos hablan ya de algo que termina. Pero es bueno que antes miremos hacia atrás, para ver lo que hemos aprendido, para dar gracias por todo lo bueno y para pedir perdón por lo que no hicimos bien. También tenemos presente nuestro colegio y el trabajo de quienes, con su dedicación y esfuerzo nos han permitido crecer, madurar y aprender cosas útiles para vivir nuestra vida como hombres y mujeres de bien.

El caminar de ellos es un momento apropiado para acercarnos más al Dios de la Vida. Tantas situaciones que se han sucedido pero, sin embargo, nos disponemos a la renovación de quien empieza otra vez el camino.

En esta Eucaristía deseamos dar Gracias a Dios y a cuantos hicieron posible este logro que ahora estaban disfrutando estos jóvenes  y poner en la presencia de Dios, con confianza, sus proyectos futuros (hermanas, profesores y padres de familia).

Por lo tanto, agradezcamos al Señor cada expresión de su amor recibida y como comunidad educativa y religiosa sigamos orando a Jesús y nuestra Madre de Consolación para  que se cumpla en la  vida de estos jóvenes  la voluntad de Dios.

Comunidad del Colegio de Granada