Día de las culturas en el iftim, méxico

Queremos compartir esta agradable experiencia que Dios nos permitió vivir, a partir de un encuentro casual que tuvimos con un hermano guatemalteco, Celso Osorio Álvarez, religioso Oblato de María, un día que paseábamos por la Basílica de la Virgen de Guadalupe en el 2011 y que nos vino a reunir nuevamente dos años después sin esperarlo.

El 30 de octubre recibimos una llamada en la casa Postulantado preguntado por unas hermanas guatemaltecas o que si en esta casa habían, pues Celso, recordaba el nombre de nuestra congregación y buscó por internet cómo localizarnos, al saber quién era nos dijo el motivo de su llamada y era que quería invitarnos para el  día 1º de noviembre a participar en el Día de las Culturas que organizaron los estudiantes del IFTIM (Instituto de Formación Teológica Intercongregacional de México).

Tuvimos la oportunidad de participar Isabel y Rosmery. Se presentó la cultura de varios países como Brasil, Indonesia, África, Inglaterra, Panamá, Paraguay, Guatemala y varios estados de México. Iniciamos con la celebración de la Eucaristía en el Centro Universitario Cultural de México (CUC), en la que hubo oraciones en distintos idiomas y la presentación del Evangelio en Portugués. Seguidamente nos movimos a otro salón donde disfrutamos de varios bailables, canciones y presentaciones. Nosotras presentamos un poco de la cultura de Guatemala con un baile de la cosecha y con algunos platillos tradicionales, en la que nos apoyaron dos compatriotas guatemaltecos estudiantes del IFTIM.

Fue enriquecedor el haber compartido y aprendido un poco de otras culturas y tradiciones, además de la deliciosa comida de cada país y estados, también el haber compartido con otros jóvenes que están en formación a la vida religiosa y que de alguna forma nos anima y nos hace ver que no vamos solas en este camino y que otros también han dejado su país por el Evangelio.

Rosmery: “Por mi parte fue enriquecedor el encontrarme con varios paisanos que al reunirnos en esa ocasión y disfrutar de la cultura de otros nos hace valorar el nuestro y notar que aunque no estemos en nuestro país llevamos a todas partes algo de él. También pude observar que en realidad no somos tan distintos, que tenemos varias cosas que nos unen y que nos parecemos no solo culturalmente sino también espiritual y socialmente.”

Isabel: “Al momento de que nos invitaron a esa celebración fue muy gratificante para mí el poder participar en una celebración donde se presentarían varias culturas. Ese día me divertí mucho y tuve la oportunidad de convivir con otras personas que de igual manera me motivan a seguir en este camino al que Dios me ha llamado. Si se volviera a repetir pues iría de nuevo. El compartir en comunidad es una acción que nos ayuda a crecer y a dar lo mejor de nosotros, en el medio en que no desenvolvemos y nos enriquecen.”

Nos despedimos y que nuestro Señor nos siga iluminando para seguir anunciándolo a través de los dones que nos da, sin ver razas ni color, sino el amor que nos une en Jesucristo y que María sea nuestro ejemplo de misión e interceda por nosotras.

Rosmery e Isabel, Postulantes MAR