Tiempo de encuentro y oración buscando respuestas

El pasado 23 de noviembre, un grupo de jóvenes procedentes de diferentes parroquias nos juntábamos en el Colegio Agustiniano de Guadalajara (España), para vivir juntos durante el fin de semana la Convivencia-Retiro Vocacional «Proyecto de Vida I». 

Angie, una de las jóvenes de la Parroquia Santa Florentina de Madrid, nos comparte cómo vivió estos días.

«Por qué me gustan este tipo de retiros? Es una de las muchas preguntas que me hacía desde que supe que participaba en el primer proyecto de vida. Sinceramente llegó un punto en que el preferí no pensarlo y simplemente vivir la experiencia, viniera como viniera. Si alguien me pregunta: ¿cómo me preparó antes de ir allí? Le diría: simplemente abre tu mente y tu corazón, deja que Dios entre en ellos y vívelo profundamente.

Al inicio nos decían que vendríamos con más preguntas que con las que quizás muchos llegaríamos, pero como cada ser humano, hijos de Dios, somos diferentes. Para mí significó la claridad a muchas dudas que se me presentaron, sorpresa de saber que podía responder a cada pregunta sin mucha dificultad, conocer personas nuevas, compartir sin conocernos nuestras vivencias… 

Empujaría, animaría a cada uno de mis amigos o chicos de la edad de mi entorno para que participe en él, porque es dejar entrar a Dios en el corazón, darme cuenta que Él me ama tal y como soy, y que siempre me mira con ojos de misericordia. 

Aprendí cosas maravillosas! Pero una de las más bellas fue; que Dios nos ha regalado a cada uno unos dones, y que así como Él lo dio todo por salvarnos, nosotros tenemos que utilizarlos para beneficio de las demás personas, olvidando un poco el egoísmo. 

Frases como la de San Agustín: Ama, haz lo que quieras! Si cada uno la analizamos buscando su significado, nos sorprendería. 

Así qué espero que, con la ayuda de nuestro Dios, todos los jóvenes que lean estas palabras, se animen a participar, porque La Paz contigo mismo y el saber amarse a sí mismo, no se compara con nada. Porque saber que Dios es nuestro amigo, que Él, a través de personas, nos hizo llegar una carta con frases como éstas: … Yo te he amado con amor eterno! Yo soy tu Señor y tu Dios! Tu eres mi amigo! Es maravilloso. 

Para concluir, termino con esta frase: TE LLAMO AMIGO, PORQUE TE HE DADO A CONOCER TODO LO QUE APRENDÍ DE MI PADRE!!! 

Gracias Señor, porque si tú no me hubieras tocado el corazón con tu luz, no hubiera podido vivir esta experiencia.»

Angie Sabogal – JAR Madrid 

 

{gallery}pvida,limit=0,random=1,width=200,height=100,gap_h=20,gap_v=20,displayarticle=1{/gallery}