Una experiencia que ha marcado mi vida religiosa y como formadora. Experiencia de intercongregacionalidad y trabajo conjunto en bien de la Vida Religiosa en México.

Quisiera expresar mi agradecimiento a Dios, a la Congregación y a la Conferencia de Religiosos de México por haberme permitido compartir durante estos tres años con la Vida Religiosa de México a través del INTER (Instituto Intercongregacional de México).

Gracias al trabajo realizado durante este tiempo pude recibir, de diferentes congregaciones, experiencias, confianza y retos. Ha habido momentos difíciles, pero en realidad, han sido mucho más los gratificantes.

       Ha sido significativo ver como la unión de las diferentes congregaciones favorecen una formación más sólida que impulsa los procesos formativos en las etapas iniciales de la Vida Religiosa de manera sistemática, gradual e integral mediante la unión de fuerzas, la optimización de recursos y la comunión eclesial.

Estar en un contacto constante también nos llevó a pensar en proyectos de conjunto, a unirnos los diferentes INTERS de la República mexicana, que en total son ocho, a ir generando estrategias para lograr unificar criterios, planes formativos y experiencias que nos sirvieran mutuamente.

       Hoy entrego esta tarea, con la nostalgia por dejar lo que he aprendido a querer, con alegría por la tarea cumplida, con agradecimiento por lo recibido y con la esperanza de seguir poniendo al servicio todo lo aprendido en favor de la formación propia y comunitaria.

Definitivamente ¡Gracias!

Hna. Sandra Patricia Maldonado Gómez

 

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