Profesión perperua de la Hna. Miriam Horta, mar
El pasado 19 de agosto, fiesta de San Ezequiel Moreno, oar, tuve la dicha de realizar mi Profesión Perpetua en la Parroquia de San Mateo Apóstol, en el pueblo de San Mateo Tlaltenango, ubicado en la Ciudad de México.
La Eucaristía fue presidida por el P. Jesús María Rodríguez, oar, y concelebró el P. Eric Contreras Reyes, párroco del lugar. Asistieron las hermanas Vilma Lessa, representante de la superiora general, Luisa Ortiz, Miroslava Calderón y María Shen, misioneras agustinas recoletas; estuvo presente mi familia, situación que me llenó de alegría ya que pude compartir con ella este momento de gracia; finalmente y no menos importante fue la presencia de un buen número de fieles de la parroquia.
La celebración fue emotiva, con sorpresas y llena de cariño. El momento de la postración y la lectura de la fórmula de la profesión, fueron momentos que son difíciles de describir en los que me sentí tan amada por el Dios de las promesas, el Dios fiel que un día me llamó para estar con Él y entregar mi vida por el Reino y mis hermanos.
Después de la celebración las hermanas y mi familia preparamos un ágape fraterno para compartir con las personas que nos acompañaron, sin embargo, la comunidad parroquial nos sorprendió ya que entre todos se organizaron para preparar una comida bastante generosa. Fue un momento de verdadera comunión eclesial.
Una vez más quiero agradecer a Dios por el regalo de mi consagración perpetua, confío en el amor irrevocable del Señor que cada día me ha manifestado y se sigue haciendo presente, me acojo a su gracia para poder vivir a plenitud el compromiso de mi entrega definitiva a él.
Agradezco también a la congregación por cuanto me ha dado y por el regalo de formar parte de ella; gracias a mi familia por su apoyo incondicional y por ayudarme a crecer en fe, gracias a tantas personas que me han manifestado de diferentes maneras su cercanía y cariño, y gracias a quienes me acompañaron en este día ya sea físicamente o por medio de las RRSS.
“Ahora te amo a ti solo, a ti solo sigo y busco, a ti solo estoy dispuesto a servir, porque tú solo justamente señoreas; quiero pertenecer a tu jurisdicción”. San Agustín
Hna. Miriam Horta, mar
