Es maravilloso saber que el anuncio del Reino y el ardor misionero sigue vivo encada uno de nuestros trabajos de acción Pastoral. Aquí en Barranquilla se trabaja en dos campos de acción muy importantes para la sociedad que diríamos son los extremos: El Hogar de niñas Hermano Policarpo que acoge niñas desde los 8 años de edad y permanecen en el hogar hasta que se gradúan de bachiller. El hogar favorece a madres que son cabeza de hogar o familias que viven en extrema pobreza y que no tienen los recursos ni el tiempo para atender y brindarle educación a las niñas. Es así como la fundación Hogar hermano Policarpo le colabora con el sostenimiento de la menor brindándole vivienda, alimentación y estudio, también se les enseña cómo vivir en fraternidad y aprender a querer a sus compañeras como sus hermanas y formar una gran familia. Esta hermosa obra cumplió 24 años el 30 de noviembre y es de gran satisfacción volver la mirada hacia atrás y comprobar todos los logros que se han conseguido a lo largo de estos años. Es hermoso y gratificante ver que muchas de las niñas de pasaron por el hogar hoy son grandes profesionales que trabajan por construir una mejor sociedad.
El Hogar San Camilo acoge a 70 ancianos que con enfermedades crónicas y edad avanzada; viven solos sin familia quien les atienda o se encargue de ellos. Es aquí en este hermoso lugar donde los acianos forman la gran familia hogar San Camilo, hermosa obra fundada por el Padre Cirilo de la comunidad de los Padres Camilos y está dirigido por nuestra hermana Verónica Amaya. El hogar San Camilo cubre a los abuelosen todas sus necesidades básicas, vivienda, alimentación, tratamientos, médicos, vestido y recreación,
Se puede decir que estas dos hermosas obras cuidan dos generaciones a las cuales hay que cuidar, la primera está creciendo y será el futuro de la sociedad sensible y generosa y la segunda, nos mueve la gratitud por todo lo que estos abuelos han hecho y por todo el legado de sabiduría y entrega que nos han dejado.
Hna. María Ofír Muñoz, mar
