La Advocación de Chiquinquirá es la más importante y sobresaliente que tiene nuestra patria colombiana, de tal manera que fue constituida como Reina de Colombia, por tanto, intercesora y protectora.

¿Pero cómo llegó esta advocación a nuestra Patria? Algunos datos históricos:

  • Antonio de Santana que era uno de los conquistadores de la Nueva Granada era devoto de la advocación de “Nuestra Señora del Rosario”, por esto mismo, mandó pintarla en un lienzo de algodón; al quedar espacio en el lienzo se pintó allí a dos grandes santos: san Antonio de Padua y san Andrés Apóstol; posteriormente la pintura fue puesta en su capilla privada.
  • Al pasar el tiempo la pintura se deterioró y su gran devoto murió; posteriormente la viuda se trasladó a Chiquinquirá y llevó consigo la pintura; su cuñada, al ver el cuadro mandó repararla y fue puesta en el mejor lugar de su capilla.
  • Después de casi 10 años, el 9 de Julio de 1586, la hermana de don Antonio, estando por más de dos horas orando ante la imagen, al terminar y saliendo una indiecita que iba pasando por el frente la capilla, se dio cuenta que de la imagen emanaba una luz resplandeciente y le avisó a la devota.
  • Todo el día el rostro de nuestra Madre del cielo estuvo resplandeciente, y el cuadro recobró sus colores los cuales se conservan hasta nuestros días.
  • Pío VII la declaró patrona de Colombia en 1829 y fue coronada canónicamente en 1919.

Con el correr de los años y en los corazones de muchos colombianos hay gran amor y devoción por esta advocación, la cual sentimos como Madre, intercesora y protectora, sobre todo hoy cuando nuestra patria se sumerge de nuevo por las injusticias y la violencia.

En medio de nuestra realidad y con gran alegría el 9 de julio de 2021 una réplica hermosa de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá hecha en mosaico, que resalta los colores de la Bandera de Colombia, se entroniza como otras muchas advocaciones latinoamericanas como la de Guadalupe en los jardines del Vaticano; La entronización fue realizada en custodia de los padres dominicos, bendecida por Monseñor Mauricio Ruda Beltz y en presencia del Embajador de Colombia en la Santa sede Jorge Mario Eatsman.

Este gran acontecimiento, “en tiempos en los que Colombia atraviesa por una serie de acontecimientos sociales que pone en crisis la estabilidad política, el modelo económico y el futuro de nuestras instituciones, por los cuales el Papa Francisco nos ha invitado a Orar, ésta advocación querida por los colombianos es un signo que nos convoca a trabajar en comunión por el bienestar y la justicia social de nuestra Patria y el mundo entero”.

 ¡¡Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá

Ruega por la paz de Colombia y el mundo entero!!

 Comunidad M.A.R. de Yopal