Desde la misión de Cochabamba, enclavada en los andes peruanos y dentro de la prelatura de Chota en el departamento de Cajamarca compartimos lo que ya es una tradición en nuestro pueblo. La visita mariana durante el mes de mayo a cada uno de los hogares cochabambinos. De esta manera también nos unimos a la Iglesia universal para honrar a nuestra madre del cielo la Virgen María.

Esta visita se inicia con la apertura del mes mariano en una solemne eucaristía en nuestra parroquia, hasta allí llegan los pobladores de cada uno de los sectores trayendo su imagen de la virgen para participar en el acto litúrgico y luego durante el mes visitar los hogares rezando el santo rosario en cada casa de familia que lo va solicitando.

Los vecinos se reúnen alrededor de la imagen y cada tarde elevamos nuestra avemarías y padre nuestros matizando con cantos marianos cada misterio del rosario. 

Es justo reconocer la participación de los niños quienes muchas veces se disputan entre ellos por intervenir en el rezo, aunque a veces se les olvida la mitad del avemaría o padrenuestro…dando colorido y alegría a este momento de fe popular.  Finalizado el rosario generalmente se comparte un café con su bizcocho y queso, A veces el compartir es un poco más contundente “pollito mechado”, humitas etc.

Las misioneras agustinas recoletas entusiasmaron al pueblo con esta bella costumbre y así fue naciendo la devoción al santo rosario que se viene realizando por más de 25 años y se va consolidando como una bella tradición.

¡María nos dice estoy con ustedes!