Desde el mes de marzo iniciamos con el proceso de orugas a crisálidas en la casa postulantado. No ha sido fácil, fue un tiempo en que el “sillón de la vergüenza” (así le llamaban, con una sonrisa, a la sala de entrevistas personales) se llenaba de confianza y esperanza al saber que una nueva etapa se estaba acercando a la vida de las postulantes.

Cada una de ellas manifestaba su gran anhelo de continuar en este camino, asumiendo su inquietud por lo nuevo, lo desconocido, pero lo más deseado al sentirse amadas y llamadas por Cristo, “el Camino, la Verdad y la Vida”.

Hasta aquí nos ha ayudado el Señor”, decía una de ellas, con mucha confianza en Aquel que en todos los momentos fue la gran motivación para seguir caminando a pesar de tantas piedras, ramas, charcos y todo lo que se puede encontrar en un camino.

Al inicio de 2020 éramos ocho las que conformábamos esta comunidad, después siete, más tarde seis, entre nuevos destinos, vacaciones… Ahora estamos dos hermanas, porque las orugas se han ido para Colombia a vivir su siguiente transformación -de la cual estamos muy alegres- y pedimos a Dios por la perseverancia de cada una de ellas, ofrecemos al Señor su vida, su vocación y un feliz noviciado.

Al final del mes mayo, las postulantes fueron regresando de sus vacaciones, la primera de Guatemala, Juanita; dos días después Gisela de México, y para el 6 de junio Eduarda y Camila regresaban de Brasil. Ese mismo día ¡¡¡sorpresa!!!! Había una contagiada de COVID 19 en la casa. Las hermanas respiramos lo más profundo que pudimos y nos fuimos al centro de salud y sólo resultó la postulante que dio positivo. A la siguiente semana, el resto de Israel regresó al centro de salud, para realizarse el test y todas dimos negativo. ¡Qué alegría y qué respiro! Los cuidados aumentaron estando dentro de casa.

El domingo 13 de junio, el párroco del Cristo de la Agonía, celebra la misa de envío, motivando a las formandas a seguir los pasos del Maestro. El día 16 celebramos el envío al Noviciado en la comunidad con todo nuestro carisma y su simbología. El jueves 17 se encoge la comunidad, las postulantes, nuestras orugas, parten a Colombia con mucha alegría; no tuvieron piedad de dejarnos, todo el aeropuerto se enteró que iban a la tierra de las arepas.

Damos gracias a Dios por esta experiencia de la formación y acompañamiento, de alegría fraterna. Les deseamos feliz viaje y mucho celo en su siguiente etapa de formación.

Comunidad del postulantado- México