ASAMBLEA 2023, CALI

Nuestra comunidad de La Merced, con tiempo, fue preparándose para la Asamblea anual. Primero, preparando los temas en nuestras reuniones comunitarias y segundo, preparando la casa para acoger a nuestras hermanas de las comunidades del Colegio Ntra. Sra. de la Consolación y de la Casa de hermanas Mayores del Limonar. Para nosotras, una asamblea, es un regalo de Dios por un doble motivo, uno, el encuentro con las hermanas de las otras comunidades, pues no tenemos tantas oportunidades para encontrarnos, y otro, conocer cómo llevamos la vida en las comunidades, y animarnos en el seguimiento al Señor como MAR. Comenzamos el día 2 con la liturgia del día, contando con nuestra madre María, ya que era sábado y ella es la mujer consagrada por excelencia. Algunos signos nos ayudaron en
nuestra reflexión, y eran una invitación a vivir como ella: dando VIDA, siendo SERVIDORAS, reconociendo la obra del Señor, HUMILDES, y como ella, CONSAGRADA a hacer siempre la voluntad de su Señor. Nos alegró escuchar el saludo de nuestra superiora general Hna. Olga Lucía Pérez, quien nos animó poner por obra las Determinaciones, buscando ante todo la comunión. Había expectativa sobre la persona que nos daría las charlas, pero encontramos a Ana Leonilde Martínez, una persona sencilla, acogedora. El tema: “La experiencia de ser mujeres plenas en la vida consagrada desde una vida compartida en fe y esperanza”, fue toda una invitación, a conocernos, trabajar nuestras heridas, valorarnos. De esa manera, podemos ser más auténticas en nuestras relaciones con nuestras hermanas y con Dios. El tema, aunque era extenso, fue ameno y variado, con algunas dinámicas de conocimiento personal, muy interesantes. Terminamos el día contentas, agradeciendo al Señor por todo lo que nos regala. El día 3, domingo, fue para escuchar a las comunidades sobre su vivencia del carisma y cómo perciben el paso de Dios por ellas. Todas fueron compartiendo de diferentes formas, acompañando con fotos, su experiencia. Nuestra comunidad después de trabajar en reunión comunitaria, se distribuyó los temas. En diálogo, unas hermanas expresaron su vivencia de la oración y la espiritualidad, otra hermana en forma de oración, presentó la vida fraterna; también en diálogo se presentó la vida misionera y finalmente un cartel con las proyecciones para el 2024.
El paso de Dios por la comunidad lo expresaron las hermanas diciendo que Dios pasa en cada momento, pero que es necesario estar atentas. Sin embargo, hay acontecimientos significativos, que son llamadas fuertes: acontecimientos mundiales que nos llevan a orar
y a cuestionarnos; eclesiales, como el sínodo: congregacionales como el capítulo general; comunitarios, como la presencia del nuevo capellán y uno muy fuerte, la partida de nuestra hermana Verónica.

Nuestro trabajo para el 2024: Continuar en serio nuestro camino de conversión, disponibilidad, escucha; seguir atentas a acoger a las personas que nos visitan. Fueron dos días completos, muy aprovechados. Damos gracias al Señor por estas oportunidades que nos brinda y que nos animan a compartir y a seguir trabajando por ser fieles como María, quien siempre estuvo a la escucha del maestro.