NO SE ACCEDE A LA VERDAD SINO A TRAVÉS DEL AMOR

 

La comunidad de San Agustín amaneció de fiesta en el día de Santa Mónica, quien nos ofrece un ejemplo de perseverancia y fortaleza para confiar en la acción de Dios. Además, celebramos con gratitud los 90 años de vida de nuestra hermana Lucía González Alzate, una vida entregada y compartida con generosidad.

Temprano en la mañana, durante la Eucaristía, elevamos nuestra acción de gracias por las maravillas y dones que el Señor nos ha concedido, y que sigue derramando en nuestras vidas. Estos regalos se hicieron aún más visibles en cada celebración de las fiestas agustinianas, y especialmente en la vida de nuestra querida hermana Lucía. Luego, continuamos el día compartiendo la mesa en un ambiente de fraternidad, acompañado de palabras que expresaron sentimientos de cariño y hermandad.

Por la tarde, la comunidad recibió el hermoso regalo de una serenata ofrecida por la familia Salazar Barrera, quienes interpretaron música colombiana e internacional, llenando el ambiente de alegría.

Al caer la noche, celebramos las vísperas de San Agustín junto a las hermanas Dominicas de Santa María Magdalena. Posteriormente, disfrutamos de un refrigerio acompañado de un delicioso postre ofrecido por nuestras invitadas. También compartimos historias sobre nuestros orígenes, el carisma de nuestras congregaciones, y las maravillas que el Señor ha hecho y sigue realizando en nuestras vidas.

El 28 de agosto, Solemnidad de nuestro Padre San Agustín, durante la oración de Laudes y la Eucaristía, ofrecimos nuestra acción de gracias a Dios por el legado que hemos recibido de nuestro padre Agustín. Rezamos para que él interceda ante el Señor, pidiéndole la gracia de continuar viviendo y promoviendo su espiritualidad.

El 31 de agosto continuamos la celebración de San Agustín con las familias de nuestras hermanas, amigos cercanos y la comunidad Framar. Iniciamos el día con la Eucaristía y luego compartimos una comida fraterna. A continuación, disfrutamos de una hermosa obra de teatro, preparada e interpretada por un grupo de jóvenes estudiantes de dirección artística de la Universidad Javeriana, bajo la dirección de Simón Baquero Salazar. Desde una perspectiva juvenil y con un estilo teatral único, nos deleitaron con una representación de Agustín como héroe en situaciones de confusión y angustia.

Damos gracias a Dios por la oportunidad de celebrar y compartir nuestro carisma.

Comunidad San Agustín – Bogotá