Para dar gracias a nuestro buen Dios, el miércoles 30 de junio, nuestro colegio celebró una eucaristía de fin de curso con todos los docentes y hermanas de la comunidad. Esta se llevó a cabo en la mañana de este día después de una actividad que se realizó con ellos.
La eucaristía fue presidida por el padre José Gabriel Martín, sacerdote diocesano, quien nos invitaba en sus sencillas y sentidas palabras a seguir remando mar adentro, a lanzar esas redes que están llenas de esperanza. Así termina el padre: el Señor es nuestro timón y Santa María de la Consolación, nuestra estrella y nuestra guía, nuestro faro y nuestro puerto.
Este curso ha sido intenso y lleno de nuevas aventuras pero hemos llegado al final y todos juntos. Ha sido increíble la capacidad de adaptación que han tenido los alumnos y profesores a esta nueva realidad que empezamos a vivir al comienzo de este curso. Este camino que parecía imposible de recorrer, lleno de miedos, parecía que no lo lograríamos, pero con el favor de Dios y todos colaborando, llegamos al final.
Es increíble la capacidad y responsabilidad de los niños al llevar a cabo este método de trabajo en tal situación y de poder transformar los problemas en oportunidades…
Agradecemos el esfuerzo de cada uno de los alumnos y docentes, por no rendirse y por luchar hasta que todo funcionara de la mejor manera posible….
Podemos decir que Dios ha estado grande con nosotros y estamos alegres…por esta razón qué mejor manera de bendecir su nombre y agradecerle tantas dádivas recibidas que colocando frente al altar nuestros anhelos y deseos por tanta misericordia recibida.
Comunidad del colegio de Granada
